lunes, 9 de marzo de 2009

Sobre ese familiar punto medio entre el orgullo y la rabia

Jugó el Atleti y lo hizo bien y al contraataque y con ganas, y de haber salido las cosas como debían habría ganado por goleada en un partido de esos que se viven con miedo, se acaban con rabia y, con el tiempo, se paladean con orgullo.


El sábado, ya hacia la hora de comer, la hinchada colchonera se dedicó a cumplir con los ritos auto-impuestos a los que acude para ayudar al equipo a hacer lo que debe. Desconfiada tras años y años de ver prodigios inolvidables, desastres igualmente inolvidables, victorias absurdas y derrotas lógicas, derrotas absurdas y victorias lógicas, de ver jugadores que centran cuando hay que tirar, otros que saltan cuando hay que agacharse, porteros que juegan con el pie lo que hay que jugar con las manos y con los puños lo que hay que atrapar, de ver cómo ignorantes encargados de fichar jugadores mandan sobre técnicos encargados de no abrir la boca cuando los ignorantes fichan a quien fichan, la afición del Atleti se encomienda en proporción notable a lo desconocido, lo esotérico y lo oculto para tratar de entender por qué cuando uno espera una cosa de este equipo debe prepararse exactamente para lo contrario y cuando uno considera que es prácticamente imposible que algo ocurra debe tomarlo inmediatamente como la posibilidad más probable.

En vista del panorama, decíamos, la afición se dedicó el sábado por la mañana a recordar exactamente qué habían hecho el domingo anterior durante las horas previas al partido contra el Barça, aquel partido en el que, como invocado por un conjuro, apareció de nuevo el Atleti de siempre iluminando Madrid y nos dio un alegrón que duró hasta el viernes por la noche, antes de los nervios. Recordados los ritos, unos se vistieron con esa misma camiseta con la que fue al Manzanares seis días antes y otros llamaron a los amigos por el mismo orden que aquél día en el que el Calderón entero perdió la voz y los papeles al mismo tiempo. Unos se cambiaron la raya del pelo, como ya hicieron aquel día, y otros saltaron veintiuna veces a la pata coja sobre la misma loseta mientras canturreaban himnos secretos. Algunos, bastantes más de los que se imaginan, releyeron y releyeron la página 14 de la primera edición de "El concepto de la angustia", de Soren Kierkegaard, asintiendo no menos de 7 y no más de 9 veces al llegar al tercer párrafo. Otros, más despreocupados, comieron potaje de vigilia (más espeso y ligaíto gracias al día de reposo) y luego tomaron café y un digestivo. Entre estos últimos se contaba el que suscribe, por cierto.

Cumplidos los ritos y las ceremonias e invocados los espíritus de aquellos que nos ayudan desde arriba, que no desde lejos, el aficionado se enfrenta a una decisión importante: dónde ver el partido. Eso el que lo ve, que todos conocemos aficionados que prefieren irse al cine o escalar un pico africano o cruzar a nado el estuario del Tajo con tal de no pasar por el trago de ver a su equipo enfrentarse a según qué otro. Eso sí, el aficionado que sí quiere ver el partido gusta normalmente de verlo en grupo por aquello de aliviar la tensión y compartir la alegría. Empero, como es frecuente que en los grupos de amigos haya aficionados del equipo rival, en estas ocasiones precisas el colchonero busca la compañía única de sus correligionarios para evitar comentarios fuera de tono, afirmaciones de esas que quedan en la memoria hasta que uno encuentra la ocasión de tirársela a la cara a quien la pronunció y peleas que acaban con amistades íntimas por la única causa de un fuera de juego no pitado, un penalti injusto o una entrada a destiempo. El partido se ve entonces bien en una casa cuyo propietario comparte con los invitados su filia rojiblanca o en un bar de declarada militancia colchonera: cualquier otra opción presenta un serio riesgo de trifulca verbal o física llegando, en días de invierno, a presentar un alto índice de peligrosidad en la escala de Umbrel, índice científico que mide el riesgo cierto de que una tertulia acabe a paraguazos.

El que suscribe, por no tener más remedio, tuvo que ver el partido en medio de un bar lleno de rivales. En estas ocasiones, infrecuentes y evitables, antes del inicio uno toma posiciones y analiza el entorno con la sutileza de la fiera rodeada, analizando puntos débiles, salidas de emergencia, percheros de peso liviano que puedan usarse como alabarda y percheros de peso pesado que puedan usarse como barricada. El espectador ajeno en tierra hostil escucha lo que dicen en las mesas que le rodean y etiqueta a los presentes: a su izquierda, detrás, un exaltado algo bobo de esos que hablan mucho y a destiempo; dado que el resto del grupo no le hace ni caso, uno entiende que no es peligroso dado que carece de aliados. Delante, un aficionado de corte enfadado, de esos que considera que antes los jugadores no fingían faltas, las mujeres eran más recatadas y los tomates sabían a tomate, uno de esos a los que se desactiva rapidamente con modales exquisitos y comentarios ponderados. A la derecha, frente a la salida, un correligionario algo voceras, pero correligionario al fin y al cabo. Detrás, dos aficionados cabales que, sin compartir colores con el que suscribe sino todo lo contrario, parecen entender de fútbol y no dejarse llevar por los bochornosos comentarios del Plus, un atentado contra la equidistancia y la mesura además de un riesgo para el tímpano y el cristal de Baccarat.

Cuando el que suscribe se hallaba finalmente ubicado y conocía más o menos las áreas donde las filias y las fobias se manifestaban con claridad, salió el Atleti. Salió el Atleti, sí, volvió a salir tras una semana, volvió a aparecerse el Atleti grande. Salió Camacho, pocos años y pocos minutos, y lo hizo en un partido difícil. Y salió Pablo, el defensa que más dudas siembra últimamente y que terminó jugando bien. Salió Antonio y salió Assunção y Heitinga de lateral, en los que uno va creyendo cada vez más, y salió Ujfalusi, en el que uno siempre cree. Salieron también los cuatro de delante y ahí dejamos la presentación del episodio, que de estos hablamos continuamente. Y uno, que esperó con una ceja levantada y cara de decir a ver, a ver cuando Abel llegó al cargo, ve en este último cosas que le gustan: que Seitaridis ya no cuenta, que Camacho sí, que Maniche menos, que Forlán juega de diez y no sólo de segundo delantero, que el equipo juega más junto y se apoya más, que se creen que se puede jugar al contraataque y ganar a quien haga falta.

El caso es que salió el Atleti y una gran mayoría de la hinchada colchonera veía una misión para los primeros minutos: no encajar un gol. Que no lleguen, que a la mínima tiran y entra un gol, últimamente siempre nos pasa lo mismo, de nada vale preparar un partido si al minuto cuatro hay que ir a remolque. Pasaban los primeros minutos y el Atleti parecía bien plantado y el rival no tanto, pero la incertidumbre de la historia reciente hacía que el aficionado mirase el reloj de reojo, sin relajarse a pesar de lo que veía. Minuto cinco, no se acercan, bien, tranquilos. Diez minutos después mira el aficionado colchonero el reloj y, oh, sorpresa, es el minuto siete. Quince minutos más tarde es el minuto nueve. El tiempo pasa demasiado lento, algún aficionado preocupado llama al consulado de Suiza, oiga, que el reloj de la tele no funciona, a mí que me cuenta que soy el de seguridad.

Pero el Atleti juega y no lo hace mal, y Camacho, sometido a una prueba quizás excesiva, responde son solvencia y personalidad como suele hacerlo. El Atleti funciona, el rival no. Poco a poco se va quitando la presión de los primeros minutos, cualquiera diría que el Atleti empieza ciertos partidos cuando llevan veinte minutos. Los comentarios del bar amainan tras unos primeros minutos de lugares comunes y faltas de respeto ya oídas y no por ello menos despreciables, señal de que las cosas empiezan a verse de otro color. Se empiezan a ver de un color, mejor dicho, de dos colores conocidos y no olvidados a pesar del tiempo y la capa de mugre que últimamente los cubre. El Atleti juega como el Atleti, agresivo en el centro del campo, rápido en la salida y en el repliegue, buscando los compañeros. Delante hay pólvora y detrás lo saben, detrás hay agujeros y delante lo saben. Se juntan las líneas, se miran unos a otros, se ven las deficiencias del rival, que son muchas y notables. Tira el rival a puerta sin convencimiento ni peligro, la defensa va cogiendo confianza, se da relevos, se animan los jugadores entre ellos. El centro del campo funciona, Camacho y Assunção funcionan, Maxi y Simão ayudan y Forlán juega de diez, replegado cuando hay que defender y saliendo al galope al contraataque. Y, delante, Agüero y en torno a su figura una zona en la que se huele el pánico. El bar se silencia, se significan los nuestros y se miran entre ellos los suyos, levantan los hombros, dicen no sé, no sé.

Se queda Agüero solo, le pega fuerte y para el portero. Un aviso y un grito de lamento, no sé yo cuántas vamos a tener, no podemos fallar más, la ha tenido ahí, ay que pena. Pero cada vez que ataca el rival, cada corner y cada falta deja en su retaguardia un agujero enorme que Forlán, Simão, Maxi y Agüero han visto. Y Ujfalusi. En un corner saca un balón Simão a la banda, Ujfalusi sube en un ejercicio de fe y de saber de esto. Le tira una pared profunda a Agüero, éste guarda la bola y se trae a dos rivales viendo cómo por el centro llega Forlán al sprint y, por si hubiera alguna duda, Maxi dos metros detrás. Pero Forlán no falla, Forlán no perdona, de Forlán puede uno fiarse en estas situaciones. Marca Forlán y el bar es un estruendo aunque se calla la inmensa mayoría, qué cosas pasan a veces. Dos o tres tapados se destapan, aquí estamos también, somos cuatro en total de un total de cincuenta pero da igual. Cero uno, quién nos lo iba a decir, cero uno al descanso.

Descanso, el caos general, la cola en el baño y en la barra. Ah pero tú eres del Atleti también, pues sí, sí, de toda la vida, ah mira, yo no mucho pero he venido con mi cuñado para darle apoyo. Hombre, muy bien, somos pocos pero nos hacemos notar. Ahora empieza el segundo tiempo y veremos, yo veo bien al Atleti. Yo también pero ya sabes cómo funcionan las cosas aquí, ahora llegará el gol en fuera de juego, la tarjeta perdonada y esas cosas que ya sabemos. Eso sí, está claro, aquí hay que marcar más de un gol y ganar con claridad, cero uno es poco. Pero el Atleti está bien, que es lo que importa.

Y empieza el segundo tiempo y llega lo que Vds ya saben. El gol en fuera de juego, la tarjeta perdonada y esas cosas que ya sabemos desde hace tiempo. El rival no funciona y el Atleti sí, cada ataque rival es un ataque propio. Los más mayores abren los ojos y se dan codazos, los más jóvenes empiezan a entender cosas: el Atleti juega al contraataque, defiende con fuerza, sale con velocidad y cuando culmina jugada se repliega rápido y al unísono. El equipo rival no sabe bien cómo gestionar la avalancha, el Atleti tiene cinco, seis ocasiones claras, algunas imperdonables y otras de esas que le hace a uno apretar los dientes y los puños de rabia, una rabia inmensa: un muy buen remate al palo, una mala definición tras un regate portentoso. El Atleti juega como debe jugar el Atleti: muerde, corre y no se descompone, Agüero siembra el caos y Forlán da nuevas lecciones de fútbol táctico, técnico y físico por fascículos - más tarde, dicen, recibiría una llamada de la editorial RBA. Sinama falla un gol fácil, Simão no conserva el fuelle necesario para dejar una vez más en evidencia a ese jugador rubio platino que juega en el rival y que gusta de pegar patadas en rótulas y tibias, Agüero reclama un penalti que no parecía penalti. El Atleti pasa como un vendaval por encima de un rival altivo y descompuesto, pero no gana. Empata.

Empata. Y al final del partido y uno no sabe si gritar de ira o sacudir la cabeza tres mil veces, no puede ser, cómo hemos podido empatar este partido. Uno sabe que la afición rival, a quien viene soportando desde hace ya unos años, volverá a perder una excelente ocasión de callarse y dirá que ay que ver qué malo es el Atleti que no gana teniendo seis ocasiones claras, que qué chico es el Atleti que no retendrá a sus estrellas y acabarán de su lado. Pero todos, ellos y nosotros, sabemos lo que hemos visto. El Atleti empata en un campo hostil ante un rival que va por delante en la clasificación y la afición está enfadada y rabiosa porque no se ganó por goleada: esto nos suena, nos da rabia y también nos gusta. El equipo parece otro, cree en él y en el modelo, juega más junto y se apoya más. Y al seguidor colchonero le gusta lo visto y le gusta la sensación que ha dejado, y con el tiempo la rabia va dejando paso al orgullo y a esa sensación de estar contento sin saber muy bien por qué que antes caracterizaba nuestros lunes. Y, ya de paso, se replantea todos sus ritos y sus supersticiones, duda de los poderes mágicos de esos calcetines a rayas o de las propiedades esotéricas de ese primer plato, ese itinerario o esa llamada en ese momento. Y le queda claro que, de haber tenido un poco de suerte, de haber entrado ese palo y de no haber entrado un gol ilegal, de haber marcado el Kun en alguna de las que tuvo, el resultado habría sido escandaloso. Y con eso se queda. Y con lo que espera que llegue si se sigue así.

77 comentarios:

Dr. Caligari dijo...

Pensandolo un poco, yo he hecho casi lo mismo que en el derby del gol de Torres (y Perea).

Mariano dijo...

Acá la única propiedad esotérica es la nefasta influencia del chingón de Paternoster. El día que se achicopale y se meta en su agujero ganaremos. Viva Méjico!!

felipe dijo...

El Trampas rodeado de vikingos.
El Liverpool rodeado de reds.
El resultado el mismo.
El robo similar.
Por favor en Oporto póngase con nosotros, no haga sacrificios, yo también creo en brujas.

Dr. Caligari dijo...

y Luiz!

abantos1903 dijo...

Magnífico, Jefe!!
Es exactamente lo que sentí yo desde la mañana hasta hoy.
El atleti parece que a vuelto, ahora a rubricarlo en oporto y contra los de la porcelana.
Y entonces, si que si, nos sentiremos como hace tanto tiempo...

abantos1903 dijo...

perdonen, "ha vuelto".

Sr.Tanaka dijo...

Un 0-11 ó 0-12 hubiera sido el resultado más justo. Hubo fases que me recordó al España-Malta, sólo que no entraban.(cagüen to!)

Bueno que mañana es martes:

His armband proved he was a red - Torres, Torres
You’ll never walk alone it said - Torres, Torres
We bought the lad from sunny Spain
He gets the ball he scores again
Fer-nan-do Torres, Liverpool’s number nine.

Y el domingo creo que "el del nido" le ha dejao " al boluda" una ración de leoncito.

Vaya banda de ex futbolistas que tiene el Trampa$, ni pal indoor oiga.

A ver si somos capaces...

Forza!!

Liborius dijo...

Y mientras nosotros sentiamos todo esto, seguro que en algun lugar de España, algun niño viendo el partido con su padre, se ha hecho del atleti...si el padre es del Barca, del Valencia, del Madrid o del Malaga da lo mismo, lo importante es que el niño se haya hecho del atleti y por este camino, los niños volveran a ser del atleti.

Carlos Fuentes dijo...

por cierto, me ha parecido leer un sms en el programa de la navarro en el que se daban vivas a mario balandra, lo han visto Vds?

MSC dijo...

Acabo de ver a Aguirre en el programa de Dª María José. Echaremos de menos su elegancia, pero quizas no su futbol. Me gustó mucho el atleti, rápido y juntito, con un centro del campo que nunca fue superado. Demos crédito a abel. En la crónica vuelve a dar usted en la diana.

Dr. Caligari dijo...

Que no, fue para Carmen Miranda.

Carlos Fuentes dijo...

en estos tiempos que corren, ver a un señor bien educado es un lujo casi tan grande como ver a Forlán con el Kun domingo tras domingo

Dr. Caligari dijo...

Ya marca.com recoje las palabras de Aguirre.

Carlos Fuentes dijo...

también as.com y alguno más
de lo del sms de balandra no dicen nada, empero

MSC dijo...

Es cierto; Aguirre, Del Bosque, Tapia... No son muchos más. La buena educación y la elegancia son un rara avis en el mundo del futbol. Aun recuerdo de cuando era niño como Gárate celebraba los goles. No se puede tener más clase.

Mark Sandman dijo...

Bombazo! Maniche deja el fútbol para dedicarse al cine (y qué orgullo):

http://ffuartnoceryffu.blogspot.com/2009/03/maniche-el-nuevo-superman.html

Rafa dijo...

La genial crónica me devuelve a los 80, esos partidos en los que lo mismo les haciamos un 0-4 que nos ganaban "a su manera", pero en los que el aleti era el aleti.

P.D. Los de marca.com han visto su programa, Doña

http://www.marca.com/2009/03/09/futbol/equipos/atletico/1236634428.html

P.D.(2)Si Aguero es malo porque fallaba solo (el tema del día) ¿como eran los defensas que le marcaban?

Que en Oporto salga el aleti, con eso me conformo.

Rafa dijo...

D. Vito, disculpe usted pero repito su noticia por no actualizar.

ljrufo dijo...

Don Carlos, cuatro siempre seremos mas que cincuenta, pero ellos nunca lo comprenderán.

Dr. Caligari dijo...

No pasa nada, Don Rafa.

Dr. Caligari dijo...

Donde ayer puse recoje es recoge...

Anónimo dijo...

Excelente como siempre, don Carlos. Yo también comí potaje de vigilia,ligaíto y más sabroso :D

Madre mía Forlán...perdón, quería decir Señor Forlán. Qué pedazo de jugador.

Nathaniel Maris dijo...

Gran crónica y grandísimo el programa de la doña anoche.
Y chapeau para el señor Aguirre que demuestra que ha llevado el escudo de este equipo con una dignidad y responsabilidad encomiable.

Carlos Fuentes dijo...

suscribo al 100% las palabras del Bretón Con Pintas (de Newcastle)

Fran Omega dijo...

Cierto que es gran semana ésta, si "hay que elegir" entre la crónica de Don Carlos y el programa de Doña MJ. Lujo por duplicado. Mira qué bien.

Si, a otro nivel, tampoco hay que elegir entre Aguirre -el creador de ésto que tenemos y tal vez el mayor gentleman que se ha sentado en nuestro banquillo en la era moderna, luchando a clase y elegancia partida con Mr. Colin Addison- y Abel, a quien comienzo a considerar responsable del regreso de la motivación al grupo ... pues ojalá. Dónde hay que firmar.

Se me tiene que notar que estoy mucho, muchísimo más lleno de orgullo y optimismo, que de esa rabia que, por supuesto, también sentí el domingo.

Nathaniel Maris dijo...

Don Fran, esa foto es de cuando usted tenía pelo, ¿no?, que sepa que se da una imagen a Juan luis Cano

Dr. Caligari dijo...

Un respeto para quien lleva el pelo con discreción!

Dr. Caligari dijo...

...y un saludo a la Nati!

Fran Omega dijo...

"Hubo una vez que me confudieron con Mr. Firth".

Mil gracias, Don Nathaniel, porque de ésto que usted ha dicho, pienso presumir muchísimo.

Y no había caído en su parecido, con ese pelo, a Juan Luis Cano ... ¡pero es verdad!. También me ha encantado eso: soy gomaespumero y, antes, fui flexista convencidísimo.

Pero yo (snif) soy de los que llevo el pelo con discreción, como dice Don Vito.

Carlos Fuentes dijo...

Un respeto: D Vito tiene una rica vida interior y a su pelo le pasa lo mismo

Dr. Caligari dijo...

Rica vida interior = tenia

Carlos Fuentes dijo...

o hasta tuvo

Dr. Caligari dijo...

cuñao

Dr. Caligari dijo...

(oigan, ya que estamos en el tema: cuando empecé a ser hincha incondicional del Atleti empecé a perder el pelo).

Jesús dijo...

Pues, fíjese, a mi me crece feraz, casi, casi como a un Mario Balandra...

Jesús dijo...

Por cierto, esto dice un gran amigo de Aguirre en el vestuario rojiblanco. Nuno, Nunete, asegura que su renovación está "parada". "No quiero hablar mucho de ese tema, pero sí es cierto y me da que pensar. No llegamos a un acuerdo y, a partir de ese momento, nunca más jugué de titular. No quiero pensar que por motivos de la renovación no esté jugando".

Manchego Curado dijo...

Con que vea alguno de los vídeos de los partidos, tiene motivos este jeta. A ver si hace un partidazo mañana y se vuelve al Oporto. (No caerá ese higuico)

Manchego Curado dijo...

D. Vito, no se preocupe: a otros se les puso cano, a otros como al hortera de los Who. A otras como el estropajo Nanas. Cada uno lleva lo suyo en tó lo alto.

Carlos Fuentes dijo...

nunorrl!

Dr. Caligari dijo...

A pesar de la origen veraz de la noticia, lo de Maniche en el cine, ¿no es verdad?

Fran Omega dijo...

Siguiendo con el hilo de Don Jesús y hablando de gloriosos medias puntas (hoy es el día, veo) hay quien, a la pregunta: "¿Y usted por qué no triunfó en el Atleti?", contesta: "No, no. Yo sí que triunfé. Lo que pasa es que, como el equipo al final no se metió en la Uefa ...".

La foto de Arielito Ibagaza, el triunfador en cuestión, fue una de mis preferidas para hacer puntería con los dardos en otros tiempos. Me pregunto por qué.

qsP dijo...

Gran artículo D.Carlos, esperemos que nuestro Atleti nos ilusione así todas las semanas. El Sr. Resino tiene mi respeto, Camacho de titular.

Por cierto el mejor SMS que se pasó en el programa de DªMJ fue el que escribió la mujer de Seitaridis: "Gracias D. Javier, una griega"

Buen viaje a todos los rojiblancos.

Manchego Curado dijo...

jajajaja
me parto, D. Que No.
Y sí, D. Vito. La foto es decisiva.

Manchego Curado dijo...

Comparto la diana, D. Fran. La comparto, e incluso alguna vez, sueño por las noches.

Hele Atlética dijo...

El hortera de los who?

No empecemos... jajajajaj

Jesús dijo...

A mi los Who no me gustan, pero me hacen gracia.

abantos1903 dijo...

Y el Niño los sepultó....
El equipo que chorreaba a por la décima y que ya había remontado al barsa, en tres días se desinfló.
Perdónenles la soberbia.

Y que conste que me alegro por nuestro Niño, que yo no soy antimadridista.

Apenas....

Liborius dijo...

como la pega el tal Gerrard igualito que Raul Seleccion jajajaja

Chorrea, Chorrea!!
El chorreito se baila asi:

1 MaquinaTorres
2 El Capitán
3 Otro del capi
4 El Dossena

ljrufo dijo...

Pues según el hipólito, el gol no debió subir al marcador, el Niño no deja saltar a pepe.

Lo de estos tipos es alucinante.

Se jodan y bailen...

ljrufo dijo...

Por cierto, Doña espero que haya visto Ud. el partido con juanma rodríguez.

Liborius dijo...

Si hombre, no lo ha visto usted? yo he visto una toma en la que se observa perfectamente como Torres coge con la mano derecha una cuerda, que esta atada al cuello de Pepe, y Fernando tira energicamente de ella...si es que no se fijan ustedes en nada!! :))

qsP dijo...

Vengo de verlo y celebrarlo (en proporción de cuatro a cincuenta), pena que no estuviese el bravucón de la chilena.

¡¡¡Uno!!! el niño Torres... chorrrea, chorrea...

Hele Atlética dijo...

Los cuatro de Liverpool están sobrevalorados. Los buenos son los Rolling.

jijijij

Manchego Curado dijo...

En el primer gol Fernando comete falta y el penalti del segundo es dudoso
(me encanta, sin embargo)

Carlos Fuentes dijo...

repugnante portada del marca con lo de la mofa de Torres al gesto de Raúl
intolerable. Vomitivo casi

Paquito dijo...

A mi no me parece que haya falta en el gol de Torres, a menos que la mera imposición de sus manos deje a Pepe exangüe.

Pero casi tiene más gracia decir que sí, que es falta e inmediatamente después poner la (misma) falta de Sergio Gramos al Kun, a ver que dicen.

El H. dijo...

Que si, que vale, que falta, que si que vale, que no es penalty, pero.....

¿Que te marque Dossena?

¡¡ DOSSENA !!

Dossena primera parte y Dossena segunda.

Jous, juos, juos.... les podía haber caído una Dossena.

H.

P.D. Miedo me da que nos lo encasquetan por Seitaridis el año que viene.

Manchego Curado dijo...

Yo soy partidaria de decir que es falta y penalti injusto, ojo, D. Gan. Y sembrar dudas sobre los otros dos, por supuesto y sobre todo, en el gol de Dossena.

El H. dijo...

Dossena ha debido jugar los mismos partidos esta temporada que Camacho. Y digo que es una p***da sacar a jugadores falto de minutos en partidos tan importantes.

Pero, si luego cumplen, y a gran altura, el entrenador de turno o tiene un problema o tiene un alivio.

H.

P.D. Casualidad, que sea el mismo rival.

Fran Omega dijo...

Con Doña MJ y Don Gan, y por los mismos motivos, me apunto a asegurar que Fernando hizo falta en el primero, y que el penalty no fue penalty. Hala.

Y con Don Carlos, pensé exactamente lo mismo esta mañana con el café y ese lamentable Marca, cada vez más consagrado a los más imbéciles de entre nosotros, y a fomentar el odio. Menudo "entorno" tiene, ese otro Club de Marid.

Jesús dijo...

Ay, todavía me duele la mandíbula... Qué gracioso el video de la peña del Liverpool en Madrid, con dos tíos agachaos intentando esconderse mientras suena la alarma de un submarino... Hoy ganamos.

Fran Omega dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Fran Omega dijo...

¡Pues anda que el pringaíllo madridista ese que estaba en Anfield, y salió enfocado un ratito en la tele (¡pobre familia!) agitando como un poseso la bufanda del Everton, y gritando "¡Toma, toma, tomaaaaa!" en dirección a la Afición del Liverpool, mientras su equipo palmaba 3-0 ...!.

Hele Atlética dijo...

Parece que no juega Forlán de inicio. Puf, que nerviosa estoy.

Manchego Curado dijo...

Cómo que no juega de inicio???
A que me pido un Soberano...

Fran Omega dijo...

¿Qué parte de "lo que funciona no se toca" no entiende Abel?.

En fin, me agarro al clavo ardiendo de que en realidad no sé de fútbol, que Abel sabe más, y que hay un plan oculto y sensacional detrás de eso ...

... O que el propio Abel tiene un sentido del humor pintoresco, y se está marcando una vacilada.

Pero ha sido leerte, Hele, y ponerme a rezar. Mecanismo automático.

Manchego Curado dijo...

D. Fraaaaaaaan: es normal. Ya sabe que esta noche no son necesarios los goles (lamadrequemetrajo)

Fran Omega dijo...

El padre de Britney Spears, que la acompaña en todos sus desplazamientos para que no recaiga en sus adicciones, le ha hecho un control anti-doping a todo el equipo artístico, y se ha cepillado a tres bailarines que han dado positivo.

(ná, es por desengrasar)

Manchego Curado dijo...

Y Drew Barrimore (pronúnciese barrimooooorl) no tiene relación con su madre. Qué te paece

Jesús dijo...

Huy, qué rarito... En fin, parece, además, que ha habido bofetones entre las hinchadas. Me voy p'al bar...

SodaPop dijo...

Este hombre (Abel) se ha bebido todo el vino de Oporto (y un poco del de Méntrida, que llevaba en el botiquín) Si no, esto no tiene explicación.
¿Cuantos partidos seguidos lleva marcando Forlán?
Me acaba de dar un bajón... entre esto y el cosquilleo en el estómago no hay quien estudie.

Saludos

Manchego Curado dijo...

Buenorr díah

(así como si nada)

Mariano dijo...

Órele!

SodaPop dijo...

Buenos días

(si, mejor corramos un tupido velo. He decidido que con este solazo que hace no merece la pena cabrearse)

Saludos

Fran Omega dijo...

La memoria me ha hecho una broma y, después de pensar de dónde me venía esa sensación de dejá vu que tuve ayer; la encontré en aquél Lazio-Atleti de semifinales de la Uefa, con Antic, cuando fuimos a Roma a remontar el 0-1 de nuestro posterior amiguito Jugovic.

Como ayer, empezamos tranquiiilos, tranquiiilos, controlando, sin precipitarnos, sin ponernos nerviosos, etc, etc ... y van pasando los minutos, y esperas la reacción, el latigazo, el toque a rebato, el ahora es el momento chicos ... pero de repente es el minuto 85 y vas 0-0. Muerte dulce.

El H. dijo...

Britney Spears, Drew Barrymore, Abel...

... no le doy más vueltas, me dispongo a escuchar el dijko en solitario de Pete Doherty "Grace / Wastelands" (sale el lunes, pero yo ya lo tengo), que creo que es la única manera de digerir esto.

Y no me vuelvo a tragar un partido de 2ªB en Oporto.

H.

Manchego Curado dijo...

Estoy viendo las imágenes del Atleti anoche en el autobús del aeropuerto y Forlán tiene una cara que si pilla a Abel lo fusila. Cada uno en una punta y Forlán con la mano tapándose la cara. Y luego también he visto a Gonzalo Miró y ya me he ido a por la plancha para ponérmela en una pierna.